Sus brazos la rodearon por la espalda, reprimió un suspiro, cerró los ojos y dejó que la sensación la llenara…
Imaginó que era su amor, soñó que aquel beso que ahora recibía en el cuello era del que tanto anhelaba. Voló en su mente y esta le entregó todas las imágenes que deseaba, atardeceres en la playa, una sonrisa, un te amo, un abrazo, un beso, una lágrima, otro abrazo, un hogar, una familia, una vejez…
Ahora no reprimió el suspiro y al abrir los ojos encontró allí a su amigo incondicional, el que intentaba hacerla sentir valorada y querida…importante.
Fingió una sonrisa, aunque sabía que no le engañaba. El la abrazó con mas fuerza esta vez, la besó en la frente y se alejó. Se tomó de la mano con otra persona y se fue.
Otro suspiro se escapó de su alma al verlo marchar, miró a su alrededor y se encontró sola nuevamente, una sonrisa amarga apareció en su rostro, observó el horizonte gris y caminó por el parque durante horas… su destino era diferente, quizás no todas las personas nacieron para ser amadas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario